Traducir

jueves, 24 de mayo de 2012

Amarrado a ti Capítulo 22 Extra


¡Hola!
Supongo que os parecerá extraño que ponga un capítulo tan seguido, pero es que Alex me lo ha pedido y claro, qué menos que poner un cachito más :) Y claro, tampoco quiero que a Julia le dé un infarto jajaj Muchas gracias en serio por seguirme, nunca me cansaré de decirlo :D
Más abajo tenéis el capítulo anterior, por si todavía no lo habéis leído :)
¡Un beso muy muy grande!



En una habitación, en un barrio de Barcelona
Me había olvidado por completo. Abro el armario y observo mi vestuario. ¿Por qué siempre es tan difícil decidir? Miro las prendas una a una, prendas que ya he visto miles de veces. Estoy nerviosa. Doy otro vistazo rápido. Me decanto por mis tejanos preferidos, no quiero ir muy arreglada, es sólo un concierto. Y arriba… Pues creo que me voy a poner una camiseta rosa palo sin tirantes. Encima me pondré una americana negra, este año se llevan. En los pies me pondré mis botines sin tacón, quiero estar cómoda y no tener que preocuparme por si me duelen los pies. Pongo la música a todo volumen y me dejo llevar, tirándome en la cama y cerrando los ojos.

En un rincón de un patio de Milán (Mara)
-¿Carlo?- dice muy cerca.
Me quedo quieta, sabiendo que nos va a ver.
-¿Carlo? ¿Qué haces aquí?- insiste.
La chica nos mira sin entender nada.
-Mara, ¿estás bien?
 -No, no está bien, la he encontrado y estaba mareada, así que la he acompañado a dar un paseo para que se le pasase- se anticipa Carlo levantándose-. Creo que ya está mejor, ¿no, Mara?
-Eh, sí, creo que sí- digo esbozando una leve sonrisa.
Me levanto y camino al lado de ellos. Siento que sobro en esa imagen. Van de la mano y ella le propina un beso en los labios en señal de gracias por haberme ayudado. Lo que Carolina no sabe es que su historia con Carlo se va a acabar pronto y yo soy la culpable de todo. Y que sus labios han sido besados hace un momento por los míos.

Unas horas después, en un campo de fútbol (Darío)
-Te has ganado el viaje chaval- me mira sonriendo- Además, te lo pago yo.
-No puedo aceptar eso, no es justo.
-No, lo digo en serio, te lo pago, tú ya has cumplido tu parte, aprobar el examen, además, has hecho una pretemporada increíble, no me arrepiento de haberte fichado, ésta es tu recompensa- dice dándome un abrazo-. Y no insistas, te lo voy a pagar igual.
-Muchas gracias por todo, Leo- le doy otro abrazo.
-Eso sí, espero que en el partido de mañana lo des todo- me da una palmadita en el hombro.
-No te voy a decepcionar- me separo de él, corriendo hacia donde están mis compañeros para empezar el entreno.
Leo es genial, mañana no puedo fallar en nada, se lo debo todo. Andrea se acerca a donde estoy.
-¿Qué? ¿Qué te ha dicho?
-Tío, ¡me paga el viaje!- digo dando un gran salto, como si estuviese rematando con la cabeza.
-¡Qué enchufado!- ríe empujándome hacia adelante.
-¿Enchufado? Por lo menos he aprobado, no como tú.
-Tranquilo, acabaré aprobando- chuta una pelota hacia portería, marcando gol.
-¡Reza!- chillo para que me escuche, ya que ha ido corriendo hasta la portería en busca de la pelota.
Leo pita y nos dirigimos a donde él está. Nos comenta las jugadas que utilizaremos mañana. Escucho atento, no puedo perderme nada mañana.
Practicamos los movimientos durante toda la hora del entreno.
Media hora después…
-¡Eh, tío! ¡Salgamos hoy para celebrarlo! –grita desde el baño del vestuario.
-Buah… No sé, estoy muy cansado- digo secándome el pelo con la toalla.
-Vamos, no me seas quejica.
Me miro al espejo mientras me peino. El pelo me ha crecido bastante desde la última vez que me lo corté, no recuerdo cuando fue. Me veo diferente, no sé, más mayor. Me pregunto si le gustaré así a Aroa, estoy bastante cambiado a cuando me fui. Tanto físicamente como psicológicamente. Mi forma de ver las cosas también ha cambiado, más objetiva, aunque como todo el mundo, no puedo evitar ilusionarme en algunos aspectos.
-¡Darío! Contéstame- se pone frente al espejo de al lado y me mira de reojo.
-Eh… Pues no sé, ¿pero no habíamos dicho de ir mañana?
-Ya tío, ¿pero sabes cuándo te entran esas ganas que dices: tengo que salir?- me mira esperando una respuesta que no obtiene- Pues es lo que me pasa, ésta va a ser una gran noche, ¡vamos a ligar!- no puedo evitar reírme-. ¿Qué, qué me dices?
Le miro unos instantes, viendo su mirada de felicidad y motivación y suspiro.
-Está bien, chicas de Milán, preparaos- digo sin mucho entusiasmo.
-¡Así se dice!- me da una palmada en la espalda, riéndose de mi respuesta.
La verdad es que no estaría nada mal salir un rato, necesito despejarme. Miro el reloj de pared. Son las diez y media. Necesito tomarme un respiro, dejarme llevar, no recuerdo cuando fue la última vez que salí de fiesta.

Al día siguiente por la tarde, en ese mismo sitio
-¿Qué, tienes resaca?- dice Andrea dándome una palmadita en el hombro.
Puf… Estoy hecho polvo, no valgo ahora mismo para nada. No ha sido muy buena idea lo de salir.
-Yo estoy genial, estuvo muy bien- dice riéndose, seguro está recordando lo que pasó anoche.
Yo todavía no doy crédito. No me lo puedo creer, nunca me he desmadrado tanto. Me miro al espejo y me echo agua en el rostro, despejándome un poco. Vuelvo a mirarme y suspiro. Tengo muy mala cara. Todavía no me he cruzado con Leo, pero seguro que me echa la bronca del siglo, todo lo contrario con lo que me dijo ayer, cómo cambian las cosas.
-Qué calladito te lo tenías, Darío- le miro con rabia.
¿Se está burlando de mí? Intento pasar de sus palabras y concentrarme en el partido… ¡Es imposible! Lo de anoche no para de rondar por mi cabeza aún confundida. Estoy muy enfadado conmigo mismo,  yo no soy así, esta vez el alcohol me ha pasado factura, aunque no me sirve de excusa. No sé qué hacer, me siento fatal, creo que tengo que ir al baño… Voy corriendo, a la vez que escucho una voz masculina conocida detrás de mí. 

4 comentarios:

  1. Yo ya tengo el libro de Blue Jeans. Pero no me lo dan hasta mi cumple =) quedan cuatro dias poquito ya para comenzar a devorarlo. Hace mucho que no te pasas por el blog, hay entradas nuevas
    Un beso desde anyjustme.blogspot.com

    ResponderEliminar
  2. Ya te he respondido en mi blog, pero qué menos que hacerlo en el tuyo, ¿no?
    OMG!!! Eres la mejor, lo sabías?? hahaha me ha enacantado el capitulo como siempre... <3
    Besoooooooooooooooooossss

    Alex ;)

    ResponderEliminar
  3. Me encantaaaaaaa :) Dios, que tensión el momento en que aparece Carolina, casi me tiro de los pelos, jajajaja, para empezar, yo tambien estoy deseando leerme el libro jijiji :), ¿sabes? este comentario ya te lo escribí, pero no me lo guardó, -.- y me fui a Madrid y no pude conectarm,e jo... hubiera sido la primera en comentar... jajajajaja en fin, pobre Dario, lo van a matar jajajaja Buuf, ¿como seguirá? que ganas del siguiente! ^^ Un beso muy graaaaaaaaaaaande, :)

    ResponderEliminar
  4. AAAAY,
    ¿qué pasará después? ¡Qué tensión!
    Sigo leyendo ^^
    Besos, Amanda.

    ResponderEliminar